La República de Panamá, mi patria, el lugar en el que he vivido toda mi vida, está experimentando un despertar nacional, frase del presentador Ramiro Hernández que hoy le da título a este artículo.
Situación previa
El 26 de febrero de 1997, mediante Ley N° 9 se aprueba el Contrato de Concesión Minera celebrado entre el Estado panameño y Minera Petaquilla, S.A., hoy conocida como Minera Panamá, S.A. Este contrato le otorga a dicha empresa el derecho exclusivo para "explorar, extraer, explotar, beneficiar, procesar, refinar, transportar, vender y comercializar todos los minerales bases o preciosos en cuatro zonas que totalizan 13,600 hectáreas, ubicadas en los corregimientos de Coclé del Norte, Nueva Esperanza y San Juan de Turbe, distritos de Ornar Torrijos Herrera y Donoso, provincia de Colón, identificado como el "Proyecto Cobre Panamá".
El peligro de la minería a cielo abierto
Imagina crear un cráter enorme que irá aumentando de tamaño, año tras año. Imagina utilizar sustancias químicas (cianuro, mercurio y ácido sulfúrico, por ejemplo) altamente tóxicas. Ambas acciones son parte del proceso de la minería a cielo abierto y creo que no es muy díficil imaginar las consecuencias de las mismas para el medioambiente y, por ende, para los seres que lo habitan. Otros daños son:
- Contaminación irreversible de los suelos, del agua y del aire, afectando directamente a la población local
- Pérdida de la flora y la fauna endémica
- Contaminación acústica
- Cambios visuales (pérdida del valor turístico)
- Lluvia ácida que finalmente contamina zonas más alejadas de la mina. Panamá, un país tropical, tiene un clima muy húmedo y lluvioso.
Hablamos de daños permanentes que afectarán la calidad de vida de nuestra generación y de las siguientes, porque las operaciones de minería a cielo abierto son insostenibles. Y sé que el tema de la sostenibilidad puede resultar aburrido y hasta exagerado para algunos, pero es vital para la supervivencia de todas las especies a largo plazo.
Situación actual
Año tras año este tema fue ignorado por los gobernantes hasta que el pasado viernes 20 de octubre y de una forma sorprendentemente rápida, el presidente Laurentino "Nito" Cortizo firmó la Ley No. 406 de 2023 sobre el nuevo contrato con la empresa minera, que le otorga la posibilidad de extender su actividad hasta 40 años más. 40 años más de destrucción de un corredor biológico de importancia mundial.
Este contrato fue negociado a puertas cerradas (sin consultar a los panameños) durante meses, y no ofrece grandes beneficios económicos que compensen el daño ecológico. En realidad, ni con todo el dinero del mundo se puede compensar lo que hemos perdido. "El oro de Panamá es verde", dijo alguien sabio.
Esta es la razón de las protestas de esta semana. Todo el pueblo se ha unido como no lo hacía desde hace años, en una sola causa: conseguir la derogación de ese contrato.
La voz del pueblo merece ser escuchada; después de todo quienes nos gobiernan son servidores públicos y deben garantizar el bienestar nacional. Y esto es lo justo: se realizó un referéndum en el gobierno de Martín Torrijos con motivo de la Ampliación del Canal Interoceánico y también para el acuerdo binacional que sellaría la devolución del Canal y su Zona, los Tratados Torrijos-Carter. Este último fue convocado por el General Omar Torrijos, un dictador que, sin embargo, le permitió a su pueblo decidir su destino, en palabras del diputado Juan Diego Vásquez.
Recomendaciones para el turista
Esta es una situación excepcional. El pueblo panameño, desde los inicios de su historia, se ha caracterizado por recibir con los brazos abiertos a los visitantes. Panamá es un país hospitalario.
El Turismo es una materia importante para el país y son muchas las empresas que dependen del flujo constante de turistas. Los cierres de vías están ocasionando graves pérdidas económicas.
Sepa que los manifestantes no tienen la intención de arruinar su experiencia, pero protestar en las calles es la única opción que tienen para que sus reclamos sean atendidos.
Así es que estas son algunas recomendaciones:
1. De ser posible, evite los viajes después de las 8:30 a.m. A las 9 de la mañana puede que la vía ya esté cerrada y tenga que caminar o hacer varios trasbordos.
2. Manténgase informado en las redes sociales, ya que la información ahí no sólo es de primera mano, sino más confiable.
3. Evite visitar los puntos de encuentro de protestas (en la Ciudad de Panamá son la Cinta Costera, Ave. Balboa, la Iglesia del Carmen y la 5 de mayo). Puede entrar en contacto con gases lacrimógenos y armas de fuego.
4. Manténgase alerta. Los delicuentes siempre están al acecho.
5. Si aún no ha arribado al país, tal vez pueda reconsiderar su viaje. Posponerlo hasta que haya estabilidad es lo más recomendable.
![]() |
"Ni millones ni limosnas, queremos justicia", frase atribuida al presidente José Antonio Remón Cantera |
Si eres panameño y estás en otro país, alza la voz y apoya esta causa. Unidos somos más fuertes.
Me gustaría leer sus opiniones, comentarios y experiencias, como turistas o como panameños. En este blog todos son bienvenidos.
También agradeceré mucho si lo compartes con otras personas.
0 Comentarios